Para Lucas.

Camino abrazando las piedras y el pasto tierno regado

con manos celestiales,
recorro rincones conocidamente

inexplorados
de la infinita vertiente de recuerdos,

mientras mis pasos van

enrredándose
con la pureza de unos ojos

cristalinos,

ojos sabios y

profundos...constantes,

reyes de emociones a lo lejos,

una

alma nueva, guardada, inquebrantable de amor real,

serena, limpia, amada,

carita pragmada de inocencia cautivante

brazos siempre abiertos a lo nuevo y a lo viejo

a lo absurdo y a lo logico, a lo extraño y lo conocido

al llanto de clamor, a la sonrisa desinteresada.

¡No te asustes con el mundo !

Más grande complementarás una abrigadora risa malévola a tus

travesuras,

travesuras en juegos

que se transformarán en travesuras de vida

...donde muchos van perdiendo el encanto de soñar...

no te aquietes,

conserva tu hermosura envolvente, energía que desborda paz

no te dejes atormentar por los lazos del prejuicio, la intolerancia,

la violencia,

no pierdas el juego,
el juego de todos con todos a la ronda
de manos unidas,
pegoteadas con dulce,
abrumadas con barro,

que la ambicion no te separe de tu amigo,
con el que soñaste cambiar el mundo.

Piecesitos pequeños, déjame observar tus huellas
desde el principio hasta el final
y ser una almohada para el reflejo de las lágrimas que algún día
brincarán de tus ojitos,
ya no esas que salen cuando quieres tu leche,
tampoco las que pedían un cambio de paños,
sino las que te abrumen,
es imposible no querer ser un escudo para tí.

Consuela tus penas, ríete de tus alegrías, baila con tus danzas,
camina con tus pasos, escribe con tus letras, habla con tu voz,
camina con tus esperanzas, con tu estampa de rosicler.

¡No te asustes del mundo!

Te amo.