Mihaly Csikszentmihalyi - El Fluir (The Flow) - Subtitulado

Simple reflexión ante una sonrisa.

Darle a los niños el lugar de niños que tienen y verlos como tal.
Un ser humano con ansias de vivir y de aprender cómo funciona lo que le rodea.
Una mirada llena de asombro y expectativas para nuestra realidad.

¿Qué tan capaces somos de responder a sus preguntas?
¿Qué tan interesados estamos en ser puente entre su experiencia y su autonomía.?
¿Cómo lo han entendido nuestras familias, nuestros antepasados, cada una de las personas que han hecho y siguen haciendo nuestra historia?
¿Cuáles han sido sus intereses con nosotros? ¿Son tan visibles?

- Cabe hacer una pregunta;
Nos ven  y vemos a los/as niños como,
¿Fuentes de vida o como un obstáculo en ella?

- "No me interrumpas que estoy cimentando mis bases,
esas que cuando niña tan lejanas siempre parecieron estar,
 pero que  ya son tiempo de ponerlos en un todo coherente."


- "No te preocupes, no me interrumpes, sólo estoy cimentando mis bases
en el presente, esas que cuando niña tan lejanas siempre parecieron estar,
y que ahora sólo son y están siendo..."

Asilo Justificado.

Es complicado.

No sé qué harás o qué tienes pensado hacer, pero, es complicado desde el primer segundo.

Tendrás que trabajar y esforzarte a diario por eso, y verás en el proceso cuán débil es tu voluntad. O te auto diagnosticarás con déficit atencional, y hasta puedes agregarle hiperactividad para cargarle culpa a ello de tu no hacer. (Así los demás te puedan comprender)
Será complicado, porque debes cumplir con una fecha y un horario, una presión constante al momento de que quieras evadir esa responsabilidad. No te dejará sólo/a ni en cada segundo, cada minuto, cada hora, cada día, cada semana, cada mes... Tic - Tac - Tic - Tac - tic - tac...
Querrás estar en algún lugar del mundo, de vacaciones, de paseo por el día, pensando que justo ese momento sería el tiempo perfecto para hacer lo que siempre has querido y nunca has podido regalarte en compensación a todo tu esfuerzo, porque estás tan cansado/a...pero debo decirte que !no puedes!
 ¿Por qué? justamente  por responsabilidades como esas que tienes entre ceja y ceja (acechando). Te imaginarás que una fiesta sería tu salvación, tu descanso, o una película, con buena o mala crítica, para ver qué tan cierto será esa opinión del amigo que ya no has visto hace 10 meses. Cualquier acción será la mejor opción, antes de hacer eso que tienes que hacer.

Y ya cuando llega el momento de entrega !y no está!...
Vienen las culpas, arrepentimientos, el "si hubiera aprovechado" ese día, esa tarde, esa hora que perdí viendo una estupidez, junto a un tornado con sin fin de cuestionamientos a tu calidad de ser humano por no haber hecho algo que pudo haber sido tan fácil si le hubieses dedicado el espacio que merecía.
LLega otro invitado a esa maraña en que comienza a convertirse tu mente; la comparación con los otros. !Ellos lo hicieron!!Cómo es posible que yo no! Lo que recalca la terrible realidad, tu inteligencia está en cuestionamiento, sobrepasaste todos los límites, y tal vez deberías renunciar a hacerlo, porque además vuelven con más fuerza esas imágenes de playas, campo, autos, bailes, desenfreno, lentes de sol, pic - nic, mochileos, Machu Pichu y las pirámides de Egipto. Porque así de opresora es esa responsabilidad que tienes. !No te permite ir a otro continente siquiera!

En fin, mejor dejar de divagar y fluir con un pensamiento canalizado a la acción que debo realizar, no porque debas, sino porque quieras.
Todo está en la propia decisión y ten presente que siempre habrán dos opciones. Todo siempre estará bajo elecciones.
Además, sabrás igualmente que cuando termines ese quehacer, comenzará otro desafío, y hasta que no sientas que ames esas dificultades, y las disfrutes en esa riqueza de aprendizajes que puede ofrecerte, siempre serán la razón para tu no poder, siempre serán tu refugio de complicaciones.

Y finalmente,
Que tu "no querer" no sea una excusa para decir que no puedes.
10-4

Soplido de despedida

Adentro tengo espeso,
tengo espeso hasta el aliento,
el aliento me provoca
y al aliento quitan horas.

Quitan horas a mi ojos
tus engaños que destrozan,
las preguntas que me rondan
son disparos a mi boca.

A mi boca son disparos,
a mi pecho son estacas,
las mentiras que lanzaste
sobre mi cuerpo de hoja.

Quebrajada con los días,
atrapada en tus historias,
acumulando en mis meses
falsos sueños de tu sombra.

Creo en muchas cosas, sí,
pero ya no creo en tí,
porque no soy un juguete,
tengo alma estoy presente.

Estoy presente, sí,
con dolor entre mis manos
porque mi alma fue vagando
y recién la vengo encontrando.

Así, ahora me despido,
digo adiós con un soplido,
y apenas nos miraremos
porque no nos merecemos.

Aún si pudiera escoger
aún sin permitirnos ser,
cantaré esta canción
mientras acecha el  tal vez.

Lejos.

Me cerraste las puertas de tu vida,

qué hice yo para merecerlo?

No te he juzgado, no te he agredido y no te he ofendido

Te amo como amigo pero

mi error fue no amarte como hombre.

Cuán pecado más grande ha de ser esto?

Me echas de tu vida con la lejanía.

Me hieres y resientes todo lo que siento por tí.

No es odio, es tristeza

No es rabia, es melancolía

Te extraño y sé que me extrañas,

pero tus miedos son más fuertes.

Dónde quedaron todas tus palabras?,

recuerdas algunas de las mías?

Dónde estás?

Podríamos compartir tanto de nuestras vidas

pero nuestra complicidad se marchó

junto a un adiós que nunca llegó.

Siento una culpa deformada por la circunstancia...

No puedo buscarte más,

no puedo esperarte más,

has trizado mi pecho...

y en el fondo de éste a la vez,

sé que es lo que menos quisieras...

Pero ya está,

 al parecer acabó.

Quizás de testaruda quise pensar siempre lo contrario,

ya sabes como soy.

Y es que entraste cuan mago

con su manta blanca a mi alma.

Y sé como eres,
ambos nos descubrimos transparentes frente al otro.

Recorrimos juntos episodios

crudos y hermosos de nuestra biografía, 

principalmente allí,
en esa bola de cristal

representada como tu casa,

cotidianos...acompañándonos
con helados y galletas dulces.

Pero así tal cual te vas,
Te vas.

Deberé resguardarte en mi recuerdo

y aunque sé lo vivo que estás

siento que debo comenzar mi duelo por tí.

Desconozco si alguna vez volveremos a vernos frente a frente,

pero confío en la vida misma que amo,

que todo cuanto emprendas será bendecido,

estarás acompañado por la luz del amanecer

y esta misma te resguardará en el anochecer.

Será imposible para mi corazón por cursi que suene,

no mandar luz también.

Apelo a tu ángel de la guarda que te proteja

y en tu interior encuentres la calma cuando sientas penas.

De alguna forma siempre esperaré a cuando decidas volver,

no puedo evitarlo.

Disculpa si alguna de mis palabras

son ásperas de tan sinceras.

Aquí.

Tengo que estar aquí,
Tengo que respirar aquí,
es el lugar para atravesar
con arena los dedos.

Este es el viento que debe abrazarme y recorrerme.

Suavemente deslizando
el cabello en la cara,
en el cuello y los hombros.
Este es el lugar,
aquí debía estar.

Bienvenida tranquilidad
mis abrazos te besan,
mis besos te sonríen
mis sonrisas se impregnan.

Te bañan de sutileza sincera.

Acepto el miedo, acepto el frío,
acepto llegadas y acepto partidas,
acepto que muchas veces estoy perdida.

Acepto que es difícil ver la simpleza,
acepto que es fácil dejar de intentar,
acepto que la vida me pueda tomar,
y acepto que la muerte es un paso más.

Reconciliación

Alma mía, te entrego a tí mi vida,
ego mío debo quitarte el mando del concierto,
y es que fui yo quien no distribuyó bien los instrumentos.

Lo siento, no supe qué más hacer con lo que tenía.
Por favor, dame una nueva oportunidad multiverso y sé mi guía.
Perdóname, por toda falta y deseo de no continuar en la orquesta de mis días.
Te amo, espíritu mío y te decreto mi respeto.
Gracias, infinitas por amarme vida mía, por no abandonarme
cuando te lo he exigido con palabras arrogantes y silencios.

Sintonía, sé presente en mi río de agua ardiente,
que las canchas de tu tierra embarren mis pies y mi frente,
abrázame y quédate,
ayúdame a componer la sinfonía de mi vida,
alma mía,
yo me quedo contigo y tu conmigo,
 aquí y ahora,
por siempre y para siempre.

¿Empecemos con un respiro,
con los ojos cerrados y una exhalación fuerte?

Que comience.

Sabina Spielrein

Sabina Spielrein, es un nombre que a primera instancia no dice nada, pero que al interiorizar mis minutos a su vida, me conecta con un sentimiento de simpleza. Y es que este sentimiento no es de la nada, al contrario, resume lo que puede ser el conocimiento personal desde los lugares más oscuros del sí mismo, para poder ser capaz de ver la luminosidad de la vida.

Sé que suena confuso probablemente, pero debo decir que no lo es, abrir la puerta de la propia oscuridad, de lo que personal y socialmente no se quiere ver, porque puede ser un espacio del que no se pueda salir, aceptarse con las deficiencias de un mortal en constante aprendizaje, podría resultar un movimiento incómodo.

Sabina, vivió y experienció la mecanicidad y sombras del ser ser humano, tratada como "loca", sometida a múltiples vejaciones como niña, mujer y paciente, se encuentra en el camino con Jung, un terapeuta joven, que ve en ella la posibilidad de poner en práctica la novedad del momento, una técnica iniciada por Freud, y que en la actualidad aún quienes la utilizamos, debemos luchar contra el escepticismo de quienes no conocen su poder.
Sin más presentaciones, ante ustedes, la palabra.

Establecer entre el espacio de dos, un puente construido por palabras, que utiliza como carta bajo la manga, una escucha activa, puede generar el encuentro de mundos que se necesita para comunicar, un lenguaje común que trae tu mundo al mundo compartido con otros y otras.

Comenzó a ser tratada desde este conocimiento, Jung también fue puesto en duda porque todo nuevo método será criticado ante lo que podría ser una falla en el mismo, pero pudieron superar cada una de las barreras, hasta el punto de romper más allá de las necesarias.

En su rehabilitación, ambos compartieron sentimientos que los embarcó en un viaje apasionado por un tiempo del cual no tengo registro. Ambos como dos seres separados únicamente por sus cuerpos.

Jung, criticado por haber cruzado la línea, y quien sabe cómo fue tratada ella.

Entró a la universidad para estudiar Psiquiatría, y fue alumna destacada, se vincula a través de sus estudios con Freud, e inspirando en él lo que más tarde será la llamada pulsión de muerte.

Madre del psicoanálisis dicen unos, de la psicología infantil, dicen otros.
Agradezco haberme encontrado con su historia, porque sin duda ayudaré también a que siga trascendiendo. Como estudiante de Psicología, jamás la escuché nombrar, y sin duda ahora que la estoy conociendo, me alegra saber que haya existido.
Una historia viva que no acabo con su muerte, (1942, a manos de la Alemania Nazi en una sinagoga junto a un grupo de judíos, ametrallados. )
Una muerte que no acabó con su historia.

Estuvo en ambos lados, y desde allí se construyó, y reconstruyó, en la oscuridad  y en la luz, como paciente y como terapeuta, como víctima y victimaria, como alumna y profesora, como hija y como madre, como amante y esposa, como mujer, como ser,  que finalizó conociendo la oscuridad, siendo luz.

Inquietud.

Mientras limpio los pinceles,
con trementina sobre una toalla oxidada,
hago un contínuo entre mis hombros y cuello,
para generar un movimiento.

Giro mi cabeza a la izquierda
y hay un lápiz grafito 4B.

Hay un espacio.

Giro mi cabeza a la derecha
y hay una goma de miga.

Me posiciono sobre ese espacio.

Los tomo y los dejo juntos junto a mí.

Cumplida la tarea,
puedo continuar con los pinceles...